Marcela, siempre con el deseo de realizar una actividad referida al arte y Walter, decidido a salir del sistema y dedicarse a su verdadera vocación: la pintura, se unieron y encontraron un espacio donde crear un lugar diferente, donde ofrecer un servicio dedicado con pasión, responsabilidad y profesionalismo a los artistas emergentes y consagrados, dándoles la posibilidad de mostrar sus creaciones.