Celeste Berardi – El espíritu del aire

Acrílico sobre tela, 90 x 60 cm
2025

Cuentan que, en la primera noche de verano, cuando sopla el primer viento después del calor del día, aparece entre la copa de los árboles y la brisa, un antiguo espíritu del aire que fue invocado por un druida para cumplir un deseo de poder, mucho antes de que exista el tiempo humano, fueron ellos quienes con su ambición lograron matar la pureza en el corazón del druida y desde entonces, el espíritu del aire, está atrapado entre nuestro mundo y el mágico. Su presencia se percibe aún entre los árboles: un cambio en el sonido, una brisa que se mueve contra toda dirección. Dicen que quienes lo sienten es porque tienen el corazón puro, solo ellos pueden pedir un deseo y será cumplido y algún día un humano será el elegido para romper el hechizo que lo aprisiona.